Fue en el año 2004 cuando se comenzó a debatir sobre las fuentes de alimentación de un PC y su eficiencia. En este sentido, se comenzaron a hacer las primeras pruebas para clasificar la eficiencia en porcentajes de 20%, 50% y 100%. A modo general, se llegó a la conclusión de que un 80% de eficiencia significaba que se era merecedor de la certificación 80 PLUS, pero el tiempo ha ido pasando y han aparecido nuevas medidas y definiciones.
A continuación, ahondaremos en estas certificaciones y explicaremos qué significan, para lograr entender por qué son tan importantes y populares hoy en día. Además, detallaremos los distintos tipos de certificaciones 80 PLUS existentes en la actualidad.
¿Qué son los certificados 80 Plus?
En pocas palabras, un certificado 80 PLUS es una prueba que determina cuan eficiente es una fuente de alimentación para un ordenador. Al igual que ocurre con los electrodomésticos, se etiqueta el nivel de eficiencia energética con el afán de cuidar el medio ambiente y respetar los niveles de calidad estándar.
Este tipo de certificado es muy útil para que el usuario sepa de la eficacia de lo que está utilizando y promueve a que los fabricantes presenten fuentes modernas y de calidad. Pero, ¿qué es esto de eficiencia energética? Pues bien, se refiere a la cantidad de energía que se malgasta mientras se utiliza el ordenador. Por lo tanto, a mayor clasificación (por ejemplo, A, como en los electrodomésticos), más eficiente es y menos energía malgasta.
En el mundo de los ordenadores, la eficiencia energética representa la energía suministrada en comparación con la consumida. Es decir, si un ordenador consume 100 vatios y produce 80, su eficiencia es del 80%.
Para que un fabricante obtenga esta certificación debe acudir a un laboratorio independiente, enviando sus muestras y abonando por ellas para que se realicen las pruebas. En este sentido, las marcas se esfuerzan en obtenerlo y les interesa, ya que los posicionará como un productor de calidad y eficiente.
Tipos de certificados 80 Plus y sus requisitos
Hay un total de seis tipos de certificados: White, Bronze, Silver, Gold, Platinum y Titanium, en orden ascendente en cuanto a eficiencia energética. Para hacer las pruebas, se utilizan tres niveles de carga, los cuales son 20%, 50% y 100%.
| Certificado | Carga 20% | Carga 50% | Carga 100% |
|---|---|---|---|
| 80 Plus Standard | 80% | 80% | 80% |
| 80 Plus Bronze | 82% | 85% | 82% |
| 80 Plus Silver | 85% | 88% | 85% |
| 80 Plus Gold | 87% | 90% | 87% |
| 80 Plus Platinum | 90% | 92% | 89% |
| 80 Plus Titanium | 90% | 94% | 90% |
80 PLUS Standard
La certificación 80 PLUS Standard es un 82% eficiente con un nivel de carga de 20%, valor que asciende a 85% con la mitad de la batería en funcionamiento y decae nuevamente a 82% con el nivel de carga al máximo. Esta certificación es la mínima en cuanto a eficiencia establecida por la Unión Europea.
80 PLUS Bronze y Silver
En segundo lugar, tenemos la certificación Bronze, cuyos valores oscilan entre el 85% y el 88% según el nivel de carga. Algo similar ocurre con las certificaciones 80 PLUS Silver, cuyo valor mínimo de eficiencia es del 87% en cargas del 20% y del 100%, mientras que al 50% es de 90% de eficiencia energética.
80 PLUS Gold y Platinum
A partir de aquí, los niveles de eficiencia suben a valores más que aceptables. La certificación de tipo Gold, tiene una eficiencia del 90% a niveles de carga del 20%, del 92% con la mitad de nivel de carga y al 89% con niveles de carga al máximo. En cuanto a la licencia Platinum, las cifras comienzan en un 92% para niveles de carga del 20%, en 94% al 50% y en 90% con el nivel de carga al 100%.
80 PLUS Titanium
Finalmente, la certificación más eficiente es la Titanium, que garantiza una eficiencia energética del 90% incluso con un nivel de carga inferior a los casos anteriores, es decir, con apenas el 10% de carga. Con un nivel del 20% tiene una eficiencia del 94%, del 96% si hablamos de niveles de carga del 50% y, con una carga a tope al 100%, su eficiencia es del 94%.
