
¿Estás pensando en cambiar tu pantalla de ordenador pero te lías con tantas siglas y tecnologías? No te preocupes, es lo normal.
Por eso, nuestros expertos ya elaboraron una guía sobre todos los tipos de pantalla que existen actualmente en el mercado y cuáles son sus diferencias y características, aunque en este artículos nos vamos a centrar en revisar las principales diferencias entre los monitores LED y LCD. Además, te contamos cuáles son las últimas tendencias en paneles y monitores. Y es que la revolución orgánica, iniciada con los modelos OLED, no ha hecho más que comenzar. Seguro que esta guía te ayuda a elegir ahora que se acerca el Black Friday.
Características de los monitores LCD y LED
Los monitores LCD empezaron a extenderse durante la primera década del siglo XXI, monopolizando el mercado a finales de la misma. Estas pantallas, al igual que su evolución LED, funcionan gracias al cristal líquido; la principal diferencia entre ambas es la retroiluminación.
Una de las características de los Liquid Crystal Display era, precisamente, que utilizaban lámparas fluorescentes de cátodo frío como luz de fondo, haciendo viable todo el sistema. Es decir, que para obtener una imagen visible, estos dispositivos requerían de una fuente de iluminación adicional, ya que no pueden producirla por sí mismos.
Con una vida útil de entre 30.000 y 50.000 horas, vinieron a mejorar la precisión en la reproducción del color, la resolución y los ángulos de visión respecto a los modelos anteriores. Por eso, las pantallas LCD para PC han sido un referente durante años, y una opción cada vez más sólida y económica. Lo cierto es que no han dejado de avanzar, lo que, con el tiempo, ha dado lugar a mejores alternativas.
De hecho, los monitores LED parten de esta base. Su innovación fue el uso de módulos de diodos emisores de luz, unos componentes diminutos que ofrecen una iluminación más eficiente. También proporcionan colores más vibrantes y negros más profundos. Además, su vida útil es más larga que la de los LCD convencionales y son paneles muy versátiles.
En su conjunto, permiten un ángulo de visión amplio y diseños delgados y livianos, ideales para las configuraciones modernas. La capacidad de ajustar la intensidad de la luz de fondo contribuye a un mejor control del contraste y a su adaptación a diversos entornos.
Principales diferencias entre los monitores LED y LCD
Teniendo claras las características de cada tipo de monitor, podemos hacernos una idea más precisa de sus diferencias. Esto permite comprender mejor los pros y los contras, lo que ha de servirnos, en última instancia, para tomar decisiones informadas. Pero veamos cuáles son las claves.
Calidad de imagen
Partimos de que la calidad de imagen es un factor importante, así que antes de comprar una pantalla nueva fíjate bien en sus especificaciones técnicas. En este sentido, los modelos Full LED superan a los LCD convencionales en su capacidad para ofrecer colores más ricos y negros más intensos. Esto proporciona una experiencia visual más inmersiva e impactante, por lo que son ideales para diseñadores gráficos y entusiastas de los medios visuales.
Consumo energético
Otra diferencia tiene que ver con el consumo. Y es que la tecnología LED puede gastar entre un 20% y un 30% menos que su predecesora. En cuanto al grosor, los monitores Edge LED, más delgados, están pensados para entornos modernos y estilos minimalistas. Debido a su configuración, las pantallas LCD eran algo más gruesas. Asimismo, su capacidad de respuesta ha sido tradicionalmente más lenta. Por eso, su uso fue quedando relegado para tareas cotidianas o el trabajo de ofimática, donde la precisión del color no resulta crítica.
Tecnología
¡Pero, OJO! ¿Acaso crees que los fabricantes se quedaron de brazos cruzados? Evidentemente, no. Para mejorar las prestaciones de los primitivos monitores LCD se han ido introduciendo numerosos cambios en los últimos años. Por ello, las pantallas LCD actuales, empleadas en portátiles, monitores y televisores, aunque partan de la misma tecnología, poco tienen que ver con las de hace 10 años.
Estas suelen recurrir al LED como iluminación de fondo o backlight, quedando los tubos CCFL como parte del pasado. En consecuencia, lo que se comercializa actualmente son pantallas LCD - LED que han mejorado muchísimo en cuanto a prestaciones. Sus principales variantes, dependiendo del tipo de celdas de cristal líquido que llevan y de cómo bloquean la luz, son tres:
- TN (o Twisted Nematic). Sus ángulos de visión y precisión de color son más limitados. No obstante, destaca por sus rápidos tiempos de respuesta y por ser menos costosa.
- VA (o Vertical Alignment). Fue desarrollada para mejorar los paneles TN más antiguos. Es una buena opción para quienes buscan profundidad de detalle y un equilibrio entre rendimiento y calidad de imagen; no tanto para juegos de alta velocidad.
- IPS (o In-Plane-Switching). Permite ángulos de visualización amplios de hasta 178º y colores precisos y consistentes. Es adecuada para un uso profesional y hay muchos modelos disponibles. Fue la última en llegar, pero ahora, gracias a las mejoras que ha ido recibiendo, es la más extendida.
Como ves, todas tienen sus puntos fuertes y sirven a necesidades distintas, aunque en los últimos años podemos ver cómo la industria se ha centrado sobre todo en evolucionar la tecnología IPS. Con tantas opciones, es de esperar que los precios de monitores de PcComponentes para black friday ofrezcan un abanico muy amplio de opciones para todos los bolsillos.
Nuevas tecnologías de visualización en monitores. ¿Hacia dónde vamos?
Todos estos esfuerzos para mejorar la calidad de la reproducción del color en monitores está dando lugar a sistemas mejorados impulsados por las principales marcas. De este modo, con la tecnología Nano IPS, patentada por LG, se alcanza un RGB más genuino, permitiendo disfrutar de una gama cromática más amplia. Esto gracias al bloqueo de las longitudes de onda de la luz entre los filtros rojo y verde, con una capa especial de material absorbente.
Luego están los monitores QLED, impulsados por Samsung. Aunque recurren a la iluminación externa, como hacen los paneles LCD, los píxeles se activan de manera más precisa mediante puntos cuánticos (Quantum Dots) o nanocristales. Esto permite brillos más altos y un mejor aprovechamiento del HDR. Sin embargo, sus negros no son tan puros como con el OLED.
Y es que la tecnología OLED supone un verdadero cambio, al pasar del sistema inorgánico de las LCD a uno orgánico o autoemisivo, en el que cada píxel tiene la facultad de poderse iluminar o apagar individualmente sin depender de la retroiluminación. Esto le permite optimizar el color, el brillo y sobre todo el contraste, por lo que son ideales para los entornos más oscuros.
También son más rápidos que los IPS y su respuesta, casi inmediata, mejora la ofrecida por los paneles TN. Al mismo tiempo, su contraste es más alto que el de los VA, por lo que - sobre el papel - parecen reunir todas las ventajas de los tres tipos de monitores LCD - LED que acabamos de ver. A ello se le suma que son más finos, eficientes a nivel energético y con ángulos de visión superiores en un rango absoluto.
Aunque la tecnología OLED está más extendida en televisores, empezamos a verla cada vez más en monitores para PC premium. Pero este proceso no ha estado exento de retos. El más conocido es el efecto “burn in”, que se produce por la degeneración de los materiales orgánicos cuando una imagen estática permanece durante mucho tiempo en el mismo lugar. Este es un problema que, por ejemplo, no afecta a las pantallas miniLED, la última evolución de las pantallas LED que puedes encontrar en monitores de gama alta pensados para el diseño y la creación de contenidos.
La realidad es que la producción de ambos tipos de monitores sigue siendo cara, por lo que se requiere de una mayor inversión para perfeccionar el proceso de fabricación y abaratar costes, pudiendo ser así más competitivos en una economía de escala. Hasta que esto no suceda, no parece probable que ninguna de estas dos categorías se implante en las gamas más bajas.
Conclusión
En la actualidad, la distinción entre monitores LED o LCD ha perdido relevancia, ya que prácticamente todos los monitores LCD usan algún tipo de retroiluminación LED, lo que ha impulsado su calidad de imagen, eficiencia energética y versatilidad, con lo que esta diferenciación ha quedado obsoleta.
Con la todavía reciente introducción de las tecnologías QLED, OLED o miniLED en pantallas para PC, los consumidores pueden enfocarse en las características específicas de cada modelo, atendiendo a sus necesidades, preferencias, gama - baja, media o alta - y al presupuesto disponible. Mientras, las innovaciones en este campo siguen avanzando hacia experiencias visuales cada vez más inmersivas, con gamas de color más amplias y mayor capacidad de contraste, ambas necesarias para una futura generalización de los contenidos HDR.