
Melón, sandía, melocotones, fresones, uvas, cerezas, nectarinas,... Sin duda, el verano es la mejor época para tomar fruta de temporada que nos ayude a hidratarnos ante el calor. Si, además, contamos con la mejor licuadora podremos prepararnos deliciosos zumos y batidos con los aprovechar todas sus vitaminas disfrutando al máximo de su sabor.
Cómo funciona una licuadora: ¿en qué se diferencia de una batidora?
Antes de comprar una licuadora la duda suele ser "si ya tengo una batidora, ¿necesito una licuadora?". La respuesta depende, fundamentalmente, del uso que vayas a hacer. Las batidoras suelen contar con diferentes funciones que permiten triturar, mezclar y, por supuesto, batir. Sin embargo, las licuadoras son capaces de extraer todo el jugo de la fruta, sin necesidad de añadir ningún otro líquido.
Es decir, con una batidora, ya sea de mano o de vaso, además de la fruta, necesitarás agua, hielo, leche o yogur para conseguir una textura ligera o cremosa. Además, en el proceso, las frutas y verduras pueden perder nutrientes, algo que no ocurrirá si decides comprar una licuadora. En función del modelo que elijas, con una licuadora también podrás elaborar sabrosos smoothies llenos de vitaminas que harán que cualquier momento de tu día sea un poco más dulce.
¿Qué cosas puedes hacer con una licuadora?
Las licuadoras sirven para hacer zumos y batidos. Aunque, inicialmente, puede parecer que no son muchas sus utilidades, una vez que le damos rienda suelta a nuestra creatividad, las posibilidades son casi ilimitadas. Todo va a depender de los ingredientes y las cantidades de cada uno de ellos que añadamos y obtendremos, en cada uso, un resultado jugoso y diferente.
Según los ingredientes y gracias a nuestra licuadora podemos elaborar desde deliciosos zumos cítricos que serán el complemento perfecto en nuestros desayunos. También podemos optar por zumos verdes, llenos de antioxidantes y de proteínas vegetales que nos ayudarán a hidratarnos y a mantener una dieta equilibrada. Una vez añadimos a estos licuados algún lácteo como yogur o queso fresco conseguiremos un sabroso smoothie y sumaremos aún más proteínas y calcio a nuestra bebida. Para las opciones veganas podemos sustituirlo por leche de arroz, de almendras, de nueces o de avena.
Si, además, optamos por frutas y verduras de temporada, nos aseguraremos el máximo sabor al mejor precio.
Tipos: licuadora de prensado en frío o licuadora de centrifugado
Las licuadoras han sido, tradicionalmente, licuadoras de centrifugado, es decir, que este pequeño electrodoméstico tritura las frutas y verduras con una hoja situada en la base y las centrifuga. La rotación de esa hoja a una alta velocidad produce un calentamiento que, según los expertos, destruye las enzimas de los alimentos.
En los últimos años encontramos también en el mercado licuadoras de prensado en frío que también se conocen como extractores de zumos. Este otro tipo de licuadora, por su parte, prensa lentamente los ingredientes, además de triturarlos. Esto permite conservar casi intactos sus vitaminas y nutrientes. De hecho, los residuos salen prácticamente secos porque se aprovecha al máximo su jugo.
¿Cómo elegir licuadora?
A la hora de elegir qué licuadora comprar, te recomendamos que te prestes atención a las siguientes características:
- Potencia: aunque en cuanto a electrodomésticos solemos pensar que cuanta más potencia mejor, en este caso, dependerá de si elegimos una licuadora con un sistema de prensado en frío o un sistema de centrifugado. En el caso de licuadoras de prensado en frío, con 150W será más que suficiente. Para las licuadoras centrifugadoras, sí que es conveniente optar por un mínimo de 400W.
- Diseño: ten en cuenta que la idea es que tu licuadora esté a la vista en tu cocina, preparada para usarse en cualquier momento.
- Materiales: por lo general, las licuadoras combinan piezas en plástico y piezas en acero inoxidable. A más de lo segundo, más robusta será tu licuadora.
- Tamaño de la boca de entrada de los vegetales: aquí debes pensar que aquellos vegetales que no puedas introducir directamente tendrás que cortarlos. Por ello, cuanto más ancha sea la boca, mejor.
- Capacidad: aquí lo importante es que pienses en el uso que le vas a dar, en e número de miembros de tu familia y en el espacio del que dispones en la cocina para situar tu licuadora.
- Sistema de limpieza: después de disfrutar de un delicioso zumo, tendrás que limpiar tu licuadora. Cuanto más sencillo sea, mejor, ¿verdad?
Aprovechar la gran variedad de frutas de temporada es, sin duda, la mejor excusa para comprar una licuadora este verano que no dejarás de usar en invierno. ¿Te vas a resistir?