PcComponentes
Mi Cuenta

¿Cómo saber si tu tarjeta gráfica está dañada? Te damos 9 claves

Componentes
Clemente García - Última actualización: 28 de enero de 2025

Al igual que todos los componentes de nuestro PC, las tarjetas gráficas también pueden presentar fallos en algún momento. En este artículo te damos a conocer cuáles son los síntomas más comunes para que lo puedas detectar antes de que el problema empeore.

Una tarjeta gráfica dañada
Clemente García

Clemente García

Autodidacta, apasionado del SEO y firme defensor del videojuego como medio artístico.

Experto en reviews y actualidad

Si sabes para qué es una tarjeta gráfica, seguro que tienes sumamente claro que es uno de los componentes más importantes de tu PC. Existen varios tipos de tarjetas gráficas, pero todas ellas comparten algo en común: pueden averiarse. Si crees que puede ser tu caso y te estás preguntando cómo saber si tu tarjeta gráfica está dañada, quédate porque te daremos todas las claves que necesitas saber.

Si alguna vez has notado comportamientos extraños en tu ordenador, como glitches en la pantalla, caídas drásticas de rendimiento o incluso reinicios inesperados, es posible que la GPU sea la responsable.

Señales de que tu tarjeta gráfica está dañada

A continuación, vamos a enumerar los síntomas más comunes de una tarjeta gráfica que está dañada o presentando problemas.

Pantallazos azules o artefactos gráficos

Uno de los síntomas más comunes de una tarjeta gráfica dañada son los fallos visuales. Estos pueden manifestarse como artefactos gráficos, es decir, líneas, cuadros o distorsiones extrañas en la pantalla. Además, los temidos pantallazos azules también podrían estar relacionados con la GPU si ocurren al realizar tareas que precisan de gran procesamiento gráfico.

Caídas drásticas de rendimiento

¿Tus juegos solían ejecutarse de manera fluida y ahora sufren tirones constantes? Un descenso repentino del rendimiento gráfico es una de las señales más comunes de que tu tarjeta gráfica podría estar dañada. Esto se refleja en tirones o bajadas de FPS (fotogramas por segundo) al jugar, ralentización en programas de diseño gráfico o incluso en la carga de simples vídeos en alta resolución.

Este tipo de problema puede ser constante o aparecer solo al exigir mucho a la GPU, como cuando juegas a títulos exigentes o editas vídeos. En ocasiones, estas caídas están relacionadas con el sobrecalentamiento, un desgaste interno de la tarjeta o fallos en la memoria VRAM, lo que impide que procese los gráficos de manera eficiente.

Apagados o reinicios inesperados del PC

Si tu ordenador se apaga o reinicia de forma inesperada mientras juegas o realizas tareas que demandan mucho a la GPU, es posible que la tarjeta gráfica esté fallando. Esto ocurre porque, al no gestionar correctamente la energía o sobrecalentarse, la GPU puede provocar que el sistema se apague como medida de protección para evitar daños mayores.

Este problema es especialmente frecuente cuando la tarjeta lleva tiempo funcionando a temperaturas elevadas o cuando la fuente de alimentación no es capaz de proporcionar suficiente energía para soportar la carga de la GPU. También puede deberse a fallos internos en los circuitos o en la memoria de la tarjeta gráfica.

Sobrecalentamiento excesivo

El calor es uno de los mayores enemigos de los componentes electrónicos. Si tu tarjeta gráfica alcanza temperaturas demasiado altas, podría apagarse automática para evitar daños mayores. Herramientas como HWMonitor o MSI Afterburner te permiten comprobar las temperaturas y diagnosticar posibles problemas.

Errores al instalar controladores

Otro indicio de que tu tarjeta gráfica podría estar dañada es la dificultad para instalar o actualizar los drivers. Si el sistema no reconoce la GPU correctamente, aparecen mensajes de error al instalar los controladores o los drivers se corrompen con frecuencia, puede ser una señal de que algo no está funcionando bien en el hardware.

Ruido anómalo en los ventiladores

Otro síntoma evidente de que tu tarjeta gráfica puede estar dañada es el comportamiento anómalo de sus ventiladores. Si notas que funcionan constantemente a máxima potencia, incluso cuando no estás realizando tareas exigentes, podría ser una señal de que la GPU está sobrecalentándose o tiene problemas para regular su temperatura.

Este comportamiento puede ser causado por:

  • Acumulación de polvo: puede bloquear los conductos de ventilación o dificultar el flujo de aire.
  • Fallo en los sensores térmicos: la tarjeta podría detectar temperaturas incorrectas y activar los ventiladores innecesariamente.
  • Problemas internos de la GPU: como una pasta térmica desgastada o chips defectuosos que generan más calor del habitual.

Si bien este síntoma no siempre significa un daño irreversible, es importante tomar medidas rápidas para evitar un mayor deterioro.

Falta de señal en el monitor

Si enciendes tu ordenador y el monitor no recibe señal alguna, aunque todos los demás componentes parezcan funcionar correctamente, podría indicar un problema con la tarjeta gráfica. Este fallo puede manifestarse como una pantalla completamente negra o como un mensaje en el monitor indicando “sin señal”.

Algunas posibles causas incluyen:

  • Conexiones defectuosas: un cable HDMI, DisplayPort o VGA mal conectado o dañado puede impedir la transmisión de imagen.
  • Fallo en la GPU: si la tarjeta gráfica no está funcionando correctamente, no podrá enviar la señal de vídeo al monitor.
  • Problemas con la ranura PCIe: en casos menos comunes, la ranura de la placa base donde se conecta la GPU puede estar dañada o sucia.

Este problema también puede estar relacionado con un daño físico en la tarjeta gráfica, como condensadores quemados o soldaduras deterioradas por el uso prolongado.

Errores al cargar juegos o aplicaciones gráficas

Otro indicio de que tu tarjeta gráfica podría estar dañada es cuando experimentas errores al intentar cargar juegos o aplicaciones gráficas. Esto puede incluir cuelgues o bloqueos al iniciar un juego, fallos durante la carga de texturas o incluso la imposibilidad de abrir ciertas aplicaciones de edición.

Estos problemas pueden ir acompañados de mensajes de error o, simplemente, el programa se congela. Si este tipo de fallos se producen reiteradamente en aplicaciones que antes funcionaban sin mayor problemática, podría ser señal de que la GPU está perdiendo capacidad para gestionar los gráficos de manera eficiente.

A veces, este tipo de problemas pueden ser causados por controladores corruptos o incompatibles, pero si todo está actualizado y el problema persiste, podría ser una señal de fallo de hardware en la tarjeta gráfica.

Preguntas frecuentes sobre cómo saber si tu tarjeta gráfica está dañada

¿Cómo puedo saber si mi tarjeta gráfica está dañada?

Las señales más comunes de una tarjeta gráfica dañada incluyen caídas de rendimiento, falta de señal en el monitor, errores visuales (artefactos), apagados o reinicios inesperados, y ruidos extraños provenientes de la tarjeta. Si experimentas varios de estos síntomas, puede que tu tarjeta gráfica esté fallando.

¿Qué debo hacer si mi tarjeta gráfica tiene artefactos?

Los artefactos gráficos pueden ser causados por fallos en la GPU o en la memoria VRAM. Primero, intenta actualizar los controladores, y si el problema persiste, prueba con una limpieza de los componentes internos. Si aun así los artefactos persisten, la tarjeta gráfica podría estar irreparable, y es posible que necesites reemplazarla.

¿Puede una tarjeta gráfica dañada afectar al rendimiento de mi PC?

Sí, una tarjeta gráfica defectuosa puede provocar caídas drásticas de rendimiento, afectando a la fluidez en juegos, edición de vídeo y otras aplicaciones. Si tu tarjeta gráfica no puede procesar correctamente los gráficos, el sistema se verá ralentizado en tareas que precisan de su capacidad.

¿Es peligroso usar una tarjeta gráfica dañada?

Absolutamente. Usar una tarjeta gráfica dañada puede empeorar el problema y, en algunos casos, dañar otros componentes del PC, como la placa base o la fuente de alimentación. Además, la tarjeta gráfica podría sobrecalentarse, lo que podría afectar a su rendimiento y potencialmente generar más fallos.

¿Cómo puedo evitar daños en mi tarjeta gráfica?

Para mantener tu tarjeta gráfica en buen estado, asegúrate de que esté bien ventilada, limpia y libre de polvo. Además, actualiza regularmente los controladores y revisa que la fuente de alimentación posea suficiente capacidad para soportar su consumo energético. Evitar temperaturas excesivas y realizar un mantenimiento preventivo podría alargar la vida útil de tu tarjeta gráfica.

post
TOFU