Consejos para una buena refrigeración de tu PC
Si tu ordenador se calienta cuando abres Fortnite, si a veces temes que se pueda tostar pan sobre tu placa base, lee estos consejos para optimizar la refrigeración de tu equipo. Evitarás lo recalentamientos y alargarás la vida de los componentes.

Una correcta refrigeración de los componentes de nuestro ordenador se antoja muy relevante si queremos que estos funcionen siempre de manera óptima. Cabe recordar que si nos acabamos de pasar a la PC Master Race, tendremos que exprimir al máximo tanto la CPU como la tarjeta gráfica si queremos jugar a un título de esta generación a una tasa de frames estable.
Para evitar un sobrecalentamiento de nuestro ordenador, es necesario colocar todos estos elementos de una manera correcta con el objetivo de evitar una temperatura desmesurada en el interior de la torre, una situación que debemos evitar por todos los medios si no queremos tirar nuestro dinero a la basura.
Monta tu CPU con un disipador extra
La CPU de nuestro ordenador contiene los componentes que más se pueden llegar a sobrecalentar, sobre todo si lo exponemos a procesos demasiado exigentes como por ejemplo jugar a un título de última generación, renderizar vídeo o procesar imágenes en 3D.
Durante este tipo de actividades, nuestro procesador puede llegar a alcanzar los 90 grados sin problema alguno, una temperatura que puede tener un efecto de lo más negativo en su funcionamiento a medio o largo plazo. Sobre todo si realizamos lo que se conoce como ‘overclocking’.
¿Y qué podemos hacer para reducir esta alta temperatura dentro de nuestro procesador? Seguro que muchos os preguntaréis. Pues una buena forma de conseguirlo es a través de un disipador extra que tenga más potencia aparte de los que vienen de serie en la caja de nuestra CPU.
La torre es también muy relevante para una correcta refrigeración
La torre de nuestro PC también juega un papel muy relevante a la hora de conseguir una correcta refrigeración de todos nuestros componentes. Ya hemos hablado de la cantidad de carcasas para PC que hay disponibles en el mercado.
Si vas a exponer a tu equipo a procesos exigentes te recomendamos una torre gaming, un modelo que se caracteriza por tener unas grandes dimensiones que permite que el aire “fluya” mejor entre todos los componentes del ordenador, mientras que al mismo tiempo también permite la instalación de placas base del tipo ATX.
Asimismo, este tipo de cajas pueden venir incluso con unos ventiladores extras que van a conseguir reducir unos grados más la temperatura de nuestra CPU o tarjeta gráfica.
La fuente de alimentación también refrigera tu PC
La fuente de alimentación es uno de esos componentes algo olvidados por muchos usuarios que piensan que es más importante gastarse más dinero en una CPU o GPU de alta gama ¿Pero de qué sirve tener este tipo de componentes si después no van a quedar correctamente refrigerados y por ende no van a ofrecer un correcto funcionamiento?
En este sentido, la fuente de alimentación, aparte de aportar corriente eléctrica a todos los elementos de nuestro PC, dispone al mismo tiempo de un potente ventilador posterior que consigue “expulsar” todo el aire caliente que se produce dentro de la caja del ordenador hacia el exterior del mismo.
Os recomendamos encarecidamente que no escatiméis gastos en la fuente de alimentación de vuestro ordenador, sobre todo en una que tenga una Certificación Gold, que tenga una potencia mínima de 500-600W y que venga sobre todo con unos disipadores silenciosos que consigan reducir el ruido de vuestro PC.
Cuidado con los cables: impiden una correcta refrigeración
Seguro que al instalar las unidades de almacenamiento, tarjeta gráfica, disipadores y fuente de alimentación, os dais cuenta de que una gran cantidad de cables han “inundado” literalmente la caja de vuestro PC. En este sentido, también se antoja muy relevante que los distribuyamos de una manera correcta con el objetivo de propiciar una correcta refrigeración.
De lo contrario, nos arriesgamos a que todo el calor que se produce dentro de la torre, sea absorbido por los cables de los distintos componentes, una situación que a la larga puede tener consecuencias fatales para la salud de nuestro ordenador.
Para evitar esto, lo mejor que podemos hacer es reducir de forma considerable el volumen de cables haciendo uso de abrazaderas y empalmes que consiguen en definitiva recoger los cables y apartarlos un poco de la parte central de la caja, una zona que es esencial que esté libre de cables ya que es por ahí por donde se libera gran parte del aire caliente que se genera.
Últimos consejos para conseguir una óptima refrigeración
¿Os ha quedado ya más clara la importancia que tiene contar con una correcta refrigeración de nuestro ordenador? Ya solo te queda tener en cuenta esta serie de consejos finales que os van a ayudar todavía más en ese sentido.
- Limpiad asiduamente vuestro PC. De esta manera evitaréis que aparezcan restos de polvo y suciedad dentro de la torre que tan comunes son cuando estamos un largo tiempo sin limpiar nuestro ordenador. Una forma sencilla de hacerlo es haciendo uso de un pincel de brocha gruesa con el que eliminaremos con sumo cuidado la acumulación de polvos en ciertas zonas del ordenador.
- Mantened cerrada la caja. Al contrario de lo que se ha dicho a lo largo de los últimos años, mantener bien cerrada la caja de nuestro ordenador también se antoja muy relevante si queremos conseguir una óptima refrigeración. Desde un principio, se puede pensar que mantenerla abierta favorece que los componentes se sobrecalienten debido a que reciben aire del exterior. Sin embargo si abusamos de esta práctica, también propiciaremos que todo el polvo y pelusa de nuestra habitación entre en contacto directo con los componentes de nuestro PC.
- Apagad el equipo de vez en cuando. Son muchas las personas que se dejan el ordenador encendido durante largos días para así evitar el largo proceso que supone encenderlo de nuevo. Aunque hay que tener cuidado con abusar demasiado esta práctica. Sobre todo en verano, cuando las altas temperaturas que hay en las horas más puntas del día pueden tener un efecto muy negativo en el correcto funcionamiento de los componentes.