Los DPI es un valor que cobra una importancia tremenda cuando hablamos de un sensor óptico, y que tiene algo que ver con la sensibilidad del ratón. Un buen ratón suele tener un botón físico para cambiar el perfil de DPIs, pero, ¿para qué? Te lo decimos.
Qué son los DPI
Las siglas de DPI son Dot Per Inch (punto por pulgada, en español) y se trata de la magnitud que se usa para medir la sensibilidad de un ratón: cuanto más alto sea el DPI, más lejos se irá el cursor moviéndolo muy poco. Al contrario, unos DPIs bajos suponen una baja sensibilidad, lo que nos obligará a deslizar mucho el ratón para mover el cursor más lejos.
Por ejemplo, unos DPI de 5400 suponen que si movemos el ratón una pulgada (2.54 centímetros), moveremos el cursor 5400 píxeles en la pantalla. Y es que hay que entender que una cosa son los centímetros que movamos el ratón, y otra los píxeles en los que se desplaza el cursor en la pantalla.
Los fabricantes utilizan los DPIs para potenciar a nivel de marketing las capacidades que tiene el sensor del ratón: a mayor rango de DPIs, más necesidades cubres. Para la mayoría de las personas 5000 DPIs ya son muchos, pero hay determinados gamers que necesitan un rango más alto.
Yéndonos al mundo eSports, hay profesionales que juegan con muy poca sensibilidad (1.15 en el CS:GO, por ejemplo), mientras que otros juegan con una sensibilidad súper alta: más de 9.0.
Un ajuste alto permite que el ratón responda ante movimientos más pequeños para apuntar con menos esfuerzo, mientras que un ajuste bajo te obliga a dar “muñecazos” cuando tenemos que recorrer muchos píxeles con el cursor/mira.
La sensibilidad no es lo mismo que DPI
Cuando hablamos de DPIs, nos estamos refiriendo a las capacidades que nos ofrece el sensor del ratón, es decir, hablamos a nivel hardware. Caso distinto es la sensibilidad, que no deja de ser una configuración a nivel software que se puede determinar en el videojuego o desde Windows o Mac.
¿Qué ocurre cuándo usamos una sensibilidad muy alta con un ratón barato con muy pocos DPIS? Cuando busquemos precisión a la hora de apuntar a objetivos diminutos, el cursor saltará al moverlo porque el sensor del ratón no puede detectar esos movimientos tan pequeños.
Al final, la experiencia no es smooth (suave) y la precisión no será buena, provocando que fallemos el disparo o el ataque al objetivo.
¿Y si uso un DPI alto en una sensibilidad baja? El movimiento seguirá siendo suave, pero el cursor se moverá muy poco debido a ese ajuste de sensibilidad.
De ahí que más vale que sobre a que falte porque no habrá problema si tenemos muchos DPIs, pero si tenemos pocos y nuestro ajuste de sensibilidad es alto tendremos el problema de salto de píxeles.
Un monitor de alta resolución tiene más utilidad en un ratón con DPI alto
Anteriormente, hablábamos de los píxeles por los que se movía el cursor en la pantalla, por lo que es de interés el apunte de la resolución de la pantalla. En una pantalla de baja resolución (720p, por ejemplo), no vamos a necesitar muchos DPIs porque no hay píxeles suficientes para deslizar el cursor de manera más rápida o lenta, ¿verdad?
La cosa cambia cuando nos vamos a las resoluciones QHD (2560 x 1440) o 4K (3840 x 2160), en las que un DPI más alto nos va a beneficiar de cara a mover el cursor por la pantalla sin tener que deslizar el ratón por todo el escritorio.
Cuántos DPI necesito para jugar
Depende de cómo juegues, cómo te comportes ante las situaciones y la mejora de puntería que quieras experimentar: básicamente, nuestra personalidad y habilidad son las métricas que debemos tomar como base para saber qué DPI necesitamos.
Ante la pregunta de, ¿cuántos DPI necesito para jugar? Te respondemos de la siguiente manera:
¿Juegas con sensibilidad alta o baja?
- Si juegas con sensibilidad alta, deberías partir de los 5000 DPI. Prueba a ver opciones con sensores de 16000 DPI.
- Si juegas con sensibilidad baja, con 5000 DPI irás de sobra.
¿Cómo respondes cuándo aparece un enemigo?
- Te pones muy nervioso/a y te cuesta controlar el retroceso del arma, perdiendo puntería: aconsejamos sensibilidad baja, por lo que no sería necesario un ratón con DPI altos.
- Te pones tenso/a, pero no afecta a tu respuesta de decisión y puntería: una sensibilidad alta te podría beneficiar, por lo que un DPI alto podría darte más opciones.
¿A qué tipo de videojuegos juegas?
En los shooters, el “aim” tiene más peso e importancia, por lo que un buen ratón es esencial. Sin embargo, en otros géneros no es tan importante la cuestión de la sensibilidad, por lo que es algo a tener en cuenta.
¿Has probado ratones gaming con ciertos DPI?
La experiencia es un grado y nos permite saber si un ratón de 5400 DPIs es suficiente para nosotros o necesitamos escalar al próximo nivel.
¿Y para trabajar?
En el ámbito laboral, salvo que seas un jugador de eSports, la mayoría de ratones suelen llevar sensores ópticos y láser. Los sensores ópticos necesitan una superficie lisa y opaca para funcionar bien, mientras que los láser se adaptan a las irregularidades de las superficies para rastrear.
Por ejemplo, un ratón óptico no va a funcionar sobre un cristal, mientras que uno láser sí que podría adaptarse a ello, pudiendo rastrear cualquier superficie con irregularidades. En muchas oficinas vemos ratones láser, y aquí los DPI no tienen tanta importancia.
En el caso del trabajo, los DPIs no van a ser un problema porque no requerimos la máxima precisión, ni mucho menos. Así que, os recomendamos comprar un ratón fiable, independientemente de si es láser, óptico o tiene 10.000 DPIs.
¿Si quiero ser jugador de eSports tengo qué usar un DPI alto?
No, ya hemos dicho que depende de la sensibilidad a la que juegues: si juegas a una alta sensibilidad, sí necesitas DPIs altos para no sufrir saltos en el cursor; si juegas con baja sensibilidad (menos de 5.0 puntos), no necesitarás un sensor de más de 5000 DPIs.
De hecho, consideramos que hay otras cosas más importantes de cara a tener un ratón lo más preciso posible:
- Disposición: zurdo o ambidiestro. En este sentido, Zowie (de BenQ) fue una de las marcas que más se preocupó por los ambidiestros, ofreciendo ratones muy interesantes.
- Tipo de agarre: lo más importante de todo es que el ratón nos ofrezca una ergonomía de cara a nuestro tipo de agarre: claw grip, fingertip y palm grip. En ciertas fichas técnicas de ratones los fabricantes nos suelen especificar para qué es interesante dicho ratón.
- Tasa de sondeo (Polling Rate): la frecuencia con la que el ratón manda información al ratón. Vemos este valor expresado en hercios (Hz), y lo más interesante es que tenga 1000 Hz (equivale a 1 ms). Esto es muy importante de cara a los shooters o FPS, ya que la velocidad de respuesta es importante.
- Latencia y software para reducirla al máximo: lo que tarda un clic en llegar al PC y mostrarse en la pantalla. Aquí las tarjetas gráficas tienen su parte de trabajo, por ello NVIDIA Reflex es un ejemplo de lo que hablamos, ¡usadlo si tenéis GPU NVIDIA!
- Cuidado con los inalámbricos: si te decides por uno, intenta que tenga la menor latencia posible.