El mercado de las mejores consolas portátiles está viviendo un momento de mucho movimiento, en buena parte gracias a nuevos modelos que apuestan por más potencia, mejor ergonomía y mayor versatilidad.
Entre esas opciones destacan dos máquinas que han dado mucho de qué hablar: Steam Deck (en su versión más reciente con pantalla OLED) y Lenovo Legion GO S. Cada una promete una experiencia única y, si estás pensando en hacerte con un dispositivo portátil para jugar, aquí encontrarás toda la información que necesitas para tomar una decisión informada.
Introducción rápida a ambas consolas
Steam Deck se ha convertido en una especie de referencia en relación calidad-precio. Su versión OLED añade mejoras bastante importantes, sobre todo en la pantalla, manteniendo un rendimiento sólido y la eficiencia que ya caracterizaba a la consola original.
Por su parte, Lenovo Legion GO S se presenta como la hermana pequeña, si tenemos en cuenta el análisis de la Legion Go estándar que hicimos, con cambios que buscan mejorar los puntos débiles de la consola principal de Lenovo y ofreciendo un procesador más actual que el de Steam Deck.

Ambas opciones compiten en un terreno donde el público busca algo más que una simple consola: potencia suficiente para mover juegos exigentes, comodidad para largas sesiones de juego y, por supuesto, un buen ecosistema de software.
La clave está en ver cuál se adapta mejor a tus preferencias, ya sea por su diseño, su sistema operativo o el tipo de catálogo que te interesa.
De hecho, aquí tienes otros artículos comparando los diferentes modelos de Lenovo Legion GO con otras consolas:
- Lenovo Legion GO S vs Legion Go Original
- Lenovo Legion GO vs Steam Deck
- Lenovo Legion GO vs MSI Claw
- Lenovo Legion GO vs ASUS Rog Ally (Z1 y X)
Opciones de almacenamiento y memoria de Steam Deck vs Lenovo Legion GO S
Tanto la Steam Deck OLED como la Lenovo Legion GO S se pueden encontrar en configuraciones de 512 GB y 1 TB de almacenamiento.
En cuanto a la RAM, la propuesta de Valve incluye 16 GB en todos sus modelos, mientras que la Legion Go S parte también de 16 GB, pero existe la posibilidad de encontrar en el futuro una versión con 32 GB (aunque, por ahora, es complicada de conseguir).
Para la mayoría de jugadores, 16 GB de RAM serán más que suficientes para correr con fluidez cualquier juego de la generación actual. Sin embargo, si te interesa el máximo rendimiento posible y sueles abrir muchas aplicaciones o juegos de gran envergadura, la idea de tener 32 GB es tentadora.
Eso sí, todavía no hay demasiadas unidades de ese modelo en el mercado.
Conectividad y puertos de la Lenovo Legion GO S vs Steam Deck
En el apartado de conectividad es donde se notan más diferencias generacionales.
Steam Deck integra WiFi 5, Bluetooth 5.0 y un puerto USB-C 3.2. Son tecnologías efectivas pero algo menos actuales si las comparamos con lo que ofrece Lenovo.
La Legion Go S trae de serie WiFi 6E, Bluetooth 5.1 y, muy importante, dos puertos USB-C 4.0 (Thunderbolt 4). Esto puede marcar la diferencia si quieres exprimir el rendimiento con docks externos, pantallas adicionales o discos duros ultrarrápidos.
Quienes juegan en línea notarán también la mejora en velocidad y estabilidad que puede proporcionar el WiFi 6E.
Un vistazo al sistema operativo de la Steam Deck vs Lenovo Legion GO S
Uno de los aspectos más llamativos en esta comparativa es el sistema operativo.
Steam Deck viene con SteamOS (basado en Linux), optimizado específicamente para la consola y enfocado a la plataforma de Valve.
Esto supone una interfaz muy amigable y un consumo de recursos muy comedido. Sin embargo, hay juegos con sistemas de seguridad antitrampas (anticheat) que siguen siendo problemáticos en Linux, como Fortnite, Warzone y Call of Duty, al menos sin instalar Windows de forma manual.
Lenovo Legion GO S, por su parte, funciona sobre Windows 11. Esta elección permite instalar cualquier launcher, jugar a títulos sin restricciones de compatibilidad y acceder a servicios como Game Pass de forma nativa.
El punto débil es que Windows consume más recursos y puede reducir la autonomía, algo que no sucede tanto con SteamOS. Se espera que más adelante Legion Go S también pueda instalar SteamOS de manera oficial, abriendo la posibilidad de un arranque dual (Windows + SteamOS).
Diseño y ergonomía: ¿cuál se siente mejor en las manos?
Aunque el tamaño de ambas consolas es similar, el diseño varía.
Steam Deck OLED mantiene las líneas de la versión original, muy alabada por ser una de las consolas portátiles más cómodas.
Sus plásticos ofrecen buena resistencia y el agarre está bien pensado para sesiones largas sin fatiga excesiva. Además, añade dos touchpads que, dependiendo de tu forma de jugar y de si instalas Windows, pueden resultar muy útiles o pasar a un segundo plano.
La Legion Go S ha mejorado varios aspectos con respecto a la Legion Go estándar. Su construcción se siente sólida y, en general, se nota que Lenovo ha querido pulir detalles en ergonomía para que sea más agradable sostenerla.
Quizá sigue sin alcanzar el confort total de la Steam Deck, pero está muy cerca y la diferencia no es tan grande como en otros dispositivos de la competencia.
Controles y sensación de juego en la Steam Deck vs Lenovo Legion GO S
Un apartado donde Lenovo destaca es la calidad de los botones y los joysticks.
La Legion Go S incluye un sistema de efecto Hall en los sticks y gatillos, que elimina casi por completo la posibilidad de drift con el paso del tiempo.
Además, la cruceta y los botones se sienten muy precisos, logrando una experiencia de control sobresaliente.
Steam Deck tiene también muy buenos controles, con botones sólidos y una cruceta que responde bien, pero no llega a la misma durabilidad que ofrece el efecto Hall. Si para ti es clave la fiabilidad de los joysticks a largo plazo, la consola de Lenovo lleva ventaja.
De cualquier modo, Steam Deck no defrauda en este aspecto y, si aprecias los touchpads, ahí sí que no hay competencia directa por parte de la Legion.
Refrigeración y temperaturas de la Lenovo Legion GO S vs Steam Deck
El calor es el enemigo natural de todas las consolas potentes de mano.
Steam Deck OLED introdujo mejoras en refrigeración respecto a su primera versión, lo que ayuda a mantener una temperatura razonable aun jugando a títulos exigentes.
No obstante, la Legion Go S se hace notar por lo fresco que se mantiene su interior. El disipador y el sistema de ventilación parecen muy eficientes, logrando temperaturas sorprendentemente bajas para su potencia.
La Steam Deck ya no es aquella consola “calentorra” de sus comienzos, pero si comparamos de forma directa, la Legion Go S consigue una ventaja ligera.
Autonomía y batería de la Steam Deck vs Lenovo Legion GO S
La autonomía es un factor decisivo en cualquier dispositivo portátil.
Steam Deck OLED cuenta con una batería de 50 Wh, que en juegos AAA demandantes a 15 W puede durar unas 2-3 horas. Sin embargo, si reduces TDP y juegas a títulos menos exigentes, puedes alcanzar las 8-9 horas, con ayuda de la pantalla OLED y la optimización de SteamOS.
En la Lenovo Legion GO S, la batería sube a 55 Wh, pero su pantalla de mayor tamaño, más resolución y hasta 120 Hz suponen un consumo superior. A unos 15 W, puede rondar las 2 horas y media, similar a la Steam Deck, pero si subes a 20-30 W para aprovechar su potencia adicional, la duración cae por debajo de las 2 horas en juegos AAA, aproximadamente. El uso de Windows también puede penalizar un poco la autonomía, al requerir más recursos en segundo plano.
La pantalla: oled vs ips
Aquí nos encontramos dos filosofías distintas.
Steam Deck OLED propone una pantalla de 7 pulgadas, resolución de 800p y 90 Hz. La tecnología OLED significa colores más vivos, negros profundos y mejor eficiencia en escenas oscuras. Es una experiencia muy llamativa visualmente, perfecta para quienes disfrutan de contrastes fuertes.
La Lenovo Legion GO S apuesta por 8 pulgadas con resolución 1200p y una frecuencia de refresco de 120 Hz, además de VRR (frecuencia de actualización variable). Aunque no sea OLED, su panel IPS ofrece buena nitidez, un brillo decente y colores bastante vibrantes.
Además, los hercios extra y la posibilidad de VRR hacen que los movimientos en pantalla se vean más fluidos, lo que resulta agradable en los juegos que alcancen tasas de fotogramas elevadas.
Elegir una sobre otra dependerá de tus gustos: si valoras el contraste espectacular de un panel OLED y te vale con 800p a 90 Hz, Steam Deck es maravillosa. Si prefieres más resolución, una pulgada adicional y un refresco mayor, la Legion Go S puede ser más atractiva.
Rendimiento: ¿cuánto importa la potencia bruta?
En lo referente al rendimiento, la Legion Go S dispone de un procesador AMD Z1, más moderno que el Zen 2 de la Steam Deck. A 15 W de TDP, la portátil de Lenovo suele ofrecer entre 5 y 10 FPS más que Steam Deck en títulos AAA, dependiendo del juego.
La diferencia no es enorme, pero en títulos con exigencias gráficas elevadas, cada FPS extra se agradece. Además, la opción de subir a 20, 25 o 30 W le permite ganar un margen de potencia adicional a costa de la autonomía.
Por su parte, Steam Deck exprime muy bien su procesador, sobre todo en TDPs bajos, gracias al excelente trabajo de optimización de SteamOS. Para juegos indie o títulos menos exigentes, va sobrada y ofrece mayor duración de batería.
Si te interesa alcanzar buenos FPS sin sacrificar demasiado la autonomía, Steam Deck consigue un equilibrio muy bueno.
Precios y reflexiones finales de la Steam Deck vs Lenovo Legion GO S
Actualmente, Steam Deck OLED de 512 GB ronda los 560 €, mientras que la Lenovo Legion GO S se sitúa alrededor de los 630 €. La decisión depende de varios factores: si te atrae la idea de usar Windows 11 para jugar a todo sin preocuparte de compatibilidades, la consola de Lenovo ofrece esa ventaja.
También es la indicada si valoras obtener un mayor rendimiento en títulos exigentes y te seduce el sistema de efecto Hall para los sticks.
Sin embargo, si buscas algo más parecido a una consola tradicional, con una interfaz enfocada exclusivamente en el juego y con la ventaja de la pantalla OLED, Steam Deck tiene mucho que ofrecer. Su manejo es muy cómodo, su precio es algo más ajustado y SteamOS está muy refinado para el tipo de uso que la mayoría de personas le darían a una consola portátil.
Además, no podemos ignorar que Valve sigue actualizando y mejorando su software de manera constante.
En conclusión, cada opción tiene sus puntos fuertes: Legion Go S brinda más potencia bruta y la flexibilidad de Windows, mientras que Steam Deck es más eficiente, ligeramente más barata y optimizada hasta el extremo para la plataforma de Valve.
Antes de decidir, piensa en qué juegos sueles disfrutar, la importancia que das a la calidad de la pantalla y cuánto valoras la autonomía. Ambas consolas son, sin duda, grandes exponentes del mercado de portátiles, y cualquiera de las dos puede ser una estupenda elección para acompañarte en tus próximas partidas.