
Aficionado a la tecnología y los videojuegos desde que cogí un mando de SNES y aluciné con Super Mario World.
Qué es un disipador
Si has llegado aquí para conocer qué es un disipador de bajo perfil y sus ventajas y desventajas, es igual de importante conocer la base del asunto: qué es un disipador. Este elemento, indispensable en la informática actual, es una pieza que extrae el calor que genera el procesador.
Para ello, como explicamos en nuestro artículo dedicado a tipos e instalación de disipador CPU, este aparato utiliza un elemento activo (ventilador) o uno pasivo (aletas de aluminio) en función de su composición y estructura. En el caso del disipador activo (el más común), consigue extraer el calor a través de un elemento mecánico, que es el ventilador.
A medida que aumentan las capacidades de los procesadores, estos exigen un mayor consumo de energía que, a su vez, genera un aumento de la temperatura. Por ello, la figura y la importancia de los disipadores es vital, ya que sin estos aparatos el calor se acumularía dentro del PC y dicha condición tendría consecuencias fatales para los intereses tanto de los usuarios como del propio equipo informático.
Qué es un disipador de bajo perfil
Una vez explicado de forma sencilla qué es un disipador, toca incidir en qué es un disipador de bajo perfil y cuáles son sus ventajas y desventajas. En esencia, un disipador de bajo perfil es un componente que extrae el calor hacia arriba y no hacia los lados. Por ello, siempre se ha asociado esta opción a la gama baja, pero nada más lejos de la realidad.
Debido a sus características, los disipadores de bajo perfil son muy populares entre los equipos que utilizan un factor de forma Mini ITX, una placa base de 170 x 170 mm. En esta estructura, el espacio es muy reducido, razón por la que este tipo de disipador es perfecto para aprovechar las opciones que ofrecen los equipos con cajas pequeñas o no muy grandes.
Sin embargo, esta ventaja es, a su vez, una desventaja para algunos. Por su tamaño, los disipadores de bajo perfil solo tienen capacidad para un ventilador, razón por la que su capacidad de refrigeración se reduce en exceso. No obstante, otros aspectos como el precio, sus capacidades o la posibilidad de contar con varias gamas es una baza a favor de este dispositivo.
En la actualidad, los usuarios pueden adquirir disipadores de bajo perfil de gama baja, media y alta. Estos, disponibles a partir de 20 o 30 euros, pueden ofrecer un rendimiento similar a otras opciones como los disipadores de torre y, en casos concretos, los kits AIO de refrigeración líquida. Por ello, son una opción que muchos usuarios tienen en cuenta.
Así, la principal ventaja de los disipadores de bajo perfil está ligada a las capacidades que ofrecen a aquellos usuarios con presupuestos bajos. A su vez, también hay que hacer alusión a su formato ideal para equipos más pequeños, razón por la que pueden llegar a ser una buena opción para aquellos que no deseen montar un PC excesivamente grande.
Qué es un disipador de torre
A diferencia del disipador de bajo perfil o disipador low-profile, el disipador de torre recibe este nombre porque el bloque de aluminio está dispuesto de forma vertical y, por consiguiente, se expulsa el aire por los ventiladores horizontalmente. Así, la forma de expulsar el aire del equipo representa la principal diferencia entre ambos.
En lo relativo a la capacidad de refrigeración, lo cierto es que es una gran ventaja si lo comparamos con las posibilidades de los disipadores de bajo perfil. Sin embargo, el tamaño juega en contra de aquellos que optan por esta opción, ya que deben adquirir carcasas más grandes para confeccionar sus ordenadores.
Por su composición y estructura, son los disipadores más comunes y los que más capacidad de refrigeración manejan. Su material principal es el aluminio, una baza en su favor en lo que se refiere a precio-rendimiento, si bien es posible ver modelos con tuberías de calor de cobre.
Qué es un kit AIO
El kit AIO hace referencia a “All In One”, un término que, en resumidas cuentas, define a la cada vez más popular refrigeración líquida. A diferencia de todo lo expuesto hasta el momento, este tipo de refrigeración hace uso de un líquido o fluido para extraer el calor del procesador, conducirlo por los tubos y expulsarlo a través de un radiador compuesto de ventiladores que desechan el calor fuera de la caja.
En esencia, los sistemas de refrigeración líquida se basan en 2 principios de la termodinámica y, al mismo tiempo, en 1 principio de mecánica de fluidos:
- Conducción: el cuerpo sólido caliente pasa su calor a otro cuerpo fresco, en este caso el líquido o fluido.
- Convección: actúa a través del fluido que está en movimiento en el circuito.
- Importancia del fluido: el fluido se mueve en láminas paralelas sin mezclarse siguiendo una trayectoria suave. Así, se pretende que el flujo sea laminar para que sea más ordenado y aumente su capacidad de absorber calor.
Por tanto, la principal ventaja de la refrigeración líquida vs ventiladores CPU es la capacidad que tienen los primeros para aprovechar las virtudes de los líquidos y los fluidos. Sin embargo, el precio y el tamaño sigue siendo una baza importante que lleva a muchos usuarios a optar por los disipadores tradicionales.
Ventajas y desventajas de un disipador de bajo perfil
Como hemos mencionado en distintos puntos del artículo, las ventajas y desventajas del disipador de bajo perfil están marcadas por tres aspectos principales: precio, espacio y rendimiento.
Si nos ceñimos al precio, la opción que más convencerá a muchos usuarios es la que ofrecen los disipadores de bajo perfil. A diferencia de los de torre o los equipos de refrigeración líquida, esta son unidades asequibles que pueden conseguirse por precios que rondan los 20 o 30 euros.
Si hacemos caso al espacio, los disipadores de bajo perfil son una gran ventaja para los que desean optar por equipos más pequeños. Así, si en tus planes entra montar un PC que no tenga un gran tamaño, la opción perfecta siempre será apostar por un disipador de bajo perfil.
Por último, en lo relativo al rendimiento, aquí se encuentra una de las principales desventajas de estas unidades. Aunque no tienen nada que envidiar a las virtudes de los disipadores de torre o los kit AIO, en su vertiente más exigente los disipadores de bajo perfil no tienen mucho que hacer contra estos equipos.
¿Es mejor un disipador de torre?
La respuesta, aunque sea tan corta como imprecisa, es la siguiente: sí y no. Como especificamos en el apartado anterior, que sea mejor o no dependerá de aquello que demande cada usuario. El papel y la experiencia nos dice que es mejor el disipador de torre por cuestiones físicas, pero éstas no nos sirven si no nos cabe en la caja.
Si eres de aquellos que busca un equipo práctico, cómodo, económico y con un tamaño reducido, lo más recomendable es que optes por un disipador de bajo perfil; en cambio, sí buscas un PC algo más ambicioso, no tienes problemas con el presupuesto y no te importa el tamaño que pueda tener, un disipador de torre es tu mejor aliado.
Además, también hay que tener en cuenta un aspecto vital en ambas composiciones. Los disipadores de bajo perfil expulsan el aire hacia arriba, mientras que los de torre lo hacen horizontalmente. Por ello, en función de la estructura que tengas en mente para tu PC, también es vital conocer este aspecto de cada una de las opciones.
Dicho esto, estamos viendo un auge de configuraciones mini-ITX con kits AIO de 1 ventilador, algo que puede ser más interesante que un disipador de bajo perfil de cara al rendimiento. A nosotros nos importa la salud de vuestros ordenadores, así que debemos advertir lo siguiente:
- En una caja pequeña cada ventilador cuenta, así que tened en cuenta que vais a usar una salida/entrada de aire a la caja solo para la CPU.
- Si añadís una GPU potente y que se caliente... vais a tener que compensarlo.
- Al usar un kit AIO de 1 ventilador, necesitaréis optimizar al máximo la ventilación de la caja porque componentes como la GPU, SSDs y la misma placa base necesitan aire fresco.
- Tenedlo en cuenta aquellos que vivís en zonas o sitios calurosos a lo largo del año porque si llevamos nuestros componentes a temperaturas altas, su vida útil se reduce.
¿Puedo hacer overclock?
El overclock es una práctica consistente en aumentar la frecuencia de reloj o frecuencia de un componente, alterando su voltaje e, incluso, su power limit. Esta práctica data desde los 90s, pero os adelantamos que debéis tener una refrigeración bien construida para hacer overclock en CPU o GPU porque cada vez vienen más apretados de fábrica.
En esencia, cada componente tiene una frecuencia de reloj concreta establecida por el fabricante. Esta condición mide el rendimiento que ofrece el procesador, y al hacer overclock forzamos a la pieza en cuestión a brindarnos un rendimiento mayor sin tener que invertir en un equipo mejor.
Así, al realizar esta técnica, el dispositivo consigue realizar más operaciones por segundo, un aspecto que tiene un impacto directo en la potencia y el rendimiento tanto de la pieza en particular como del equipo en general. Pero, para aprovechar esta virtud, necesitas conocer algunos consejos de overclock para exprimir todo su potencial.
En lo relativo a los disipadores de bajo perfil, lo cierto es que sí es posible realizar el overclock a la CPU. Eso sí, estaremos limitados en temperaturas, debiendo acudir a modelos más potentes, como sucede en el caso del Noctua NH-L9i Perfil Bajo.
Los 5 disipadores de bajo perfil que debes comprar
Una vez explicados todos los detalles relacionados con los disipadores de bajo perfil y sus ventajas y desventajas, toca adentrarse en nuestro terreno favorito: los mejores disipadores low-profile del mercado.
Si estás pensando en adquirir una pieza de este tipo, lo ideal es que te decantes por una de estas cinco opciones que hemos seleccionado para ti:
Aunque hemos seleccionado 5 opciones muy interesantes por sus prestaciones y su precio, puedes echar un vistazo a todos los disipadores de bajo perfil que tenemos disponibles en la web.