Discos duros internos

Discos duros internos HDD

Un disco duro es el dispositivo en el que almacenamos toda la información de nuestro equipo. Este es indispensable, pues sin él, no podríamos disponer de sistema operativo, aplicaciones ni juegos en el PC. También llamados Hard Disk o HDD, están compuestos por una serie de platos, o discos, que giran a gran velocidad en torno a un eje. Un sistema de complejos cabezales y lectores se encargan de leer y escribir la información en cada uno de estos platos. Cuanto mayor sea el número de discos, o su densidad, mayor será la capacidad de nuestra unidad. Lo habitual en estos momentos es disponer de al menos 1 TB de capacidad, aunque otras opciones como los 2TB y 3TB, se están afianzando a gran velocidad. Un buen disco duro debe ser capaz de proveer de información a componentes como la memoria RAM o la tarjeta gráfica, pues ellos cargarán en sus respectivas celdas de memoria la información que se encuentra almacenada en nuestro soporte de almacenamiento masivo.

Dispositivos SSD y M.2

Los SSD son unidades de estado sólido, en inglés Solid State Drive, y están compuestos por una serie de chips de memoria similares a los de la memoria RAM o un pen drive. Por ello su apariencia es muy similar (al igual que ocurre en un SSD M.2), pero con la salvedad con respecto a la RAM de que la información se mantiene una vez apagamos el equipo. Al eliminar los componentes móviles de un disco tradicional, se reduce el ruido a la vez que se gana en eficiencia y durabilidad al no haber desgaste de sus componentes. Estas unidades mejoran en varias veces la velocidad de transferencia de un disco tradicional, siendo una fórmula ampliamente extendida la de utilizar estas unidades para instalar el sistema operativo y aplicaciones y juegos que usemos más frecuentemente, y un HDD auxiliar en el que almacenar documentos y otras herramientas.