Pasta Térmica
La pasta térmica es un elemento indispensable aunque muchas veces pasemos por alto su existencia. Como en PcComponentes pensamos en todo, te ofrecemos una amplia variedad de marcas y tipos de pasta térmica para que tu procesador dure mucho más tiempo.
La pasta térmica es un elemento indispensable aunque muchas veces pasemos por alto su existencia. Como en PcComponentes pensamos en todo, te ofrecemos una amplia variedad de marcas y tipos de pasta térmica para que tu procesador dure mucho más tiempo.
¿Qué función cumple la pasta térmica?
La pasta térmica es un compuesto utilizado para transmitir el calor desde la superficie del procesador hacia el radiador que lo refrigera. Se utiliza para servir de nexo de unión entre la CPU y el sistema de ventilación, pues de lo contrario puede darse el caso de que ambas superficies no hagan contacto entre sí, y por tanto la refrigeración no sea excesiva, lo que repercutirá directamente en la temperatura y funcionamiento de nuestro procesador.
Cómo aplicar la pasta térmica a tu procesador
La forma más sencilla de aplicar la pasta térmica es colocando una gota en el centro de la CPU. Mucha gente aconseja hacer 5 puntos, uno en el centro y el resto en cada esquina, pero de esta forma corremos el riesgo de que el sobrante se desborde y manche, incluso inutilice, nuestra placa.
Lo ideal es empezar con una pequeña cantidad en el centro, colocar el disipador encima y apretar. Debemos observar que la pasta contacte con ambas superficies y en el mayor área posible de ambos componentes. Si nos hemos quedado cortos, podemos añadir de nuevo otra pequeña gota. Repite este proceso hasta que el disipador y el procesador queden bien unidos, pero sin que la pasta térmica sobresalga por los bordes.
¿Qué función cumple la pasta térmica?
La pasta térmica es un compuesto utilizado para transmitir el calor desde la superficie del procesador hacia el radiador que lo refrigera. Se utiliza para servir de nexo de unión entre la CPU y el sistema de ventilación, pues de lo contrario puede darse el caso de que ambas superficies no hagan contacto entre sí, y por tanto la refrigeración no sea excesiva, lo que repercutirá directamente en la temperatura y funcionamiento de nuestro procesador.
Cómo aplicar la pasta térmica a tu procesador
La forma más sencilla de aplicar la pasta térmica es colocando una gota en el centro de la CPU. Mucha gente aconseja hacer 5 puntos, uno en el centro y el resto en cada esquina, pero de esta forma corremos el riesgo de que el sobrante se desborde y manche, incluso inutilice, nuestra placa.
Lo ideal es empezar con una pequeña cantidad en el centro, colocar el disipador encima y apretar. Debemos observar que la pasta contacte con ambas superficies y en el mayor área posible de ambos componentes. Si nos hemos quedado cortos, podemos añadir de nuevo otra pequeña gota. Repite este proceso hasta que el disipador y el procesador queden bien unidos, pero sin que la pasta térmica sobresalga por los bordes.