SSD Kingston
Kingston es una de las marcas más valoradas por los usuarios dada su larga trayectoria en el mercado. Por ello, los discos SSD Kingston son un referente para la industria y el consumidor y en PcComponentes disponemos de un amplio catálogo donde puedes elegir tu SSD según el modelo, la categoría y su capacidad, destacando los Kingston HyperX como la familia más extensa de esta marca.
Kingston es una de las marcas más valoradas por los usuarios dada su larga trayectoria en el mercado. Por ello, los discos SSD Kingston son un referente para la industria y el consumidor y en PcComponentes disponemos de un amplio catálogo donde puedes elegir tu SSD según el modelo, la categoría y su capacidad, destacando los Kingston HyperX como la familia más extensa de esta marca.
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Kingston KC600 SSD 512GB SATA3 mSATA 3D TLC NAND
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SSD Kingston NV3 500GB M.2 2230 PCIe 4.0 NVMe 3D NAND Alto Rendimiento
Kingston A400 SSD 120GB M.2 SATA III TLC
Kingston FURY Renegade 2TB SSD PCIe 4.0 NVMe con Disipador Térmico
Kingston KC600 2TB SSD 2.5" SATA 3
Kingston KC600 SSD 1TB SATA3 mSATA 3D TLC NAND
Kingston NV1 Disco SSD 250GB PCIe NVMe
Kingston NV1 Disco SSD 2TB PCIe NVMe
Kingston Technology DC2000B 480GB SSD M.2 PCI Express 4.0 NVMe 3D TLC
SSD Kingston, garantía de calidad
Las ventajas de un disco SSD son varias con respecto a los tradicionales discos duros, entre ellas su velocidad, y eso salta a la vista cuando vemos las cifras que alcanzan los Kingston HyperX, los pesos pesados de la marca que se dividen en varías familias.
La principal diferencia entre las subfamilias HyperX Savage y Kingston HyperX Predator es la latencia, también la velocidad de lectura y escritura del disco SSD, haciendo fluctuar el precio en según qué modelo elijamos, aunque siempre contando con unos números extraordinarios propios de la gama media alta de la tabla.
Todo lo que necesitas saber sobre un disco SSD
SSD es el acrónimo de Solid-State Drive (Unidad de Estado Sólido) y define una nueva arquitectura de discos duros que abandonan la tradicional utilización de discos y engranajes para sustituirlos por chips de memoria, ganando en todos los aspectos: espacio, velocidad, temperatura y consumo.
Al no disponer de piezas móviles, los SSD como los Kingston HyperX gozan de una mayor vida útil, además de resistir mejor las vibraciones y golpes a las que puede verse sometidas el equipo.
Además, la velocidad de transferencia de datos en ambas direcciones (lecturas y escritura) aumenta hasta los varios gigabytes por segundo, haciendo de estos sistemas de almacenamiento unas bestias pardas.
Al estar integradas en el mismo PCB, los chips de memoria ahorran en espacio gracias a su tamaño, y no están cubiertos por ninguna carcasa como en los discos duros, la refrigeración es mejor. Asimismo, al consumir mucho menos energía, las temperaturas son de por sí más bajas.
SSD Kingston, garantía de calidad
Las ventajas de un disco SSD son varias con respecto a los tradicionales discos duros, entre ellas su velocidad, y eso salta a la vista cuando vemos las cifras que alcanzan los Kingston HyperX, los pesos pesados de la marca que se dividen en varías familias.
La principal diferencia entre las subfamilias HyperX Savage y Kingston HyperX Predator es la latencia, también la velocidad de lectura y escritura del disco SSD, haciendo fluctuar el precio en según qué modelo elijamos, aunque siempre contando con unos números extraordinarios propios de la gama media alta de la tabla.
Todo lo que necesitas saber sobre un disco SSD
SSD es el acrónimo de Solid-State Drive (Unidad de Estado Sólido) y define una nueva arquitectura de discos duros que abandonan la tradicional utilización de discos y engranajes para sustituirlos por chips de memoria, ganando en todos los aspectos: espacio, velocidad, temperatura y consumo.
Al no disponer de piezas móviles, los SSD como los Kingston HyperX gozan de una mayor vida útil, además de resistir mejor las vibraciones y golpes a las que puede verse sometidas el equipo.
Además, la velocidad de transferencia de datos en ambas direcciones (lecturas y escritura) aumenta hasta los varios gigabytes por segundo, haciendo de estos sistemas de almacenamiento unas bestias pardas.
Al estar integradas en el mismo PCB, los chips de memoria ahorran en espacio gracias a su tamaño, y no están cubiertos por ninguna carcasa como en los discos duros, la refrigeración es mejor. Asimismo, al consumir mucho menos energía, las temperaturas son de por sí más bajas.